Hoy os comparto un champú sólido especial para pelos grasos. La fórmula es la siguiente:
Ingrediente | Porcentaje (%) |
SCI | 50 |
SCS | 15 |
Arcilla ghassoul | 8 |
Aceite de macadamia | 5 |
Extracto de ortiga | 9 |
Inulina | 2 |
Hidrolato de romero | 10 |
A.e. romero | 1 |
Ingredientes y su función dentro de la fórmula
En general suelo usar solo SCI como tensioactivo en mis fórmulas de champú sólido porque tengo el pelo ondulado y noto que el SCS me reseca un poco más. Sin embargo, es perfecto para un cuero cabelludo que se engrasa con facilidad por su alto poder de limpieza. Además, va a proporcionar una espuma con la que va a ser muy agradable lavarnos.
Siguiendo con los ingredientes que purifican el cuero cabelludo os hablo ahora de la arcilla ghassoul. Es mi arcilla favorita para el cabello por el volumen y el brillo que aporta, además de que al tener un alto poder absorbente nos ayuda con la limpieza en profundidad del cuero cabelludo sin irritar y también con los problemas de caspa.
En esta ocasión he elegido un solo aceite, el de macadamia. Tiene propiedades calmantes y suavizantes, lo que nos viene muy bien para evitar que el champú sea excesivamente detergente. Como proporciona un tacto suave y no graso se ajusta perfectamente al tipo de pelo que queremos tratar.
Siguiendo con los ingredientes acondicionadores hablamos ahora de la inulina. Es un excelente humectante que consigue un efecto suavizante sobre el cabello, además de actuar como acondicionador natural que alisa la fibra capilar.
Y por último los ingredientes específicos para tratar el pelo graso y la caspa. Por un lado tenemos el extracto de ortiga, que es eficaz para controlar la caspa gracias a su efecto purificante. Por el otro el hidrolato de romero y el aceite esencial de romero, ambos especialmente elegidos por la capacidad para regular la secreción sebácea y controlar la caspa.
Elaboración
Recordad que para manejar ingredientes en polvo, en especial tensioactivos es recomendable usar mascarilla para evitar inhalarlos e irritar nuestras mucosas.
En este caso he seguido el método de elaboración en frío.
- Añadir todos los ingredientes en polvo (SCI, SCS, arcilla ghassoul) en un recipiente y mezclar entre ellos.
- En otro recipiente pesar el hidrolato y la inulina. Agitar bien hasta que la inulina se haya disuelto.
- Una vez disuelta la inulina se puede añadir el extracto de ortiga, el aceite de macadamia y el aceite esencial. Como no tenemos tensioactivo en la mezcla, el aceite y el hidrolato no se van a mezclar uniformemente. Por ese motivo lo que haremos será agitar e inmediatamente después añadir la mezcla sobre el recipiente con los ingredientes en polvo.
- A continuación, tendremos que mezclar muy bien todos los ingredientes hasta conseguir una pasta homogénea que podremos coger y amasar con las manos. En este punto, antes de dar la forma definitiva a nuestro champú, haremos una medición de PH para asegurar que se encuentra entre 5-5’5. En el caso de ser más alto incluiremos unas gotitas de ácido láctico para bajarlo.
- Dejar secar el champú al menos 24 horas antes del primer uso.
Modo de empleo
Con el cabello mojado, coge tu pastilla de champú, humedécela y pásala por la cabeza. También puedes frotarlo entre tus manos si no quieres pasar directamente la pastilla por el pelo. Recuerda aplicarlo solo en el cuero cabelludo y no de medios a puntas para no resecar en exceso tu cabello.
Conservación
La mejor forma de conservar tu champú es ponerlo sobre una jabonera drenante para asegurar que se seca entre lavados. Ten en cuenta que en los productos sólidos no es necesario incluir conservante (y en esta elaboración no lo hemos incluido) dada su falta de agua, pero en el caso de los champús sólidos puedes añadirlo si quieres un extra de seguridad.
Si tienes pensado llevártelo de viaje existen unas cajitas con jabonera incluida que son muy útiles para conservar nuestros productos sólidos en buen estado.